PEÑAROL 2 MALVÍN 1

A NICO Y PALA
Peñarol encontró en dos momentos de inspiración de sus goleadores, la manera de encaminar un trámite que le costó muchísimo. Malvín planteó un partido de poco recorrido, lo que hizo bajar el voltaje del mismo en varios pasajes. La paridad cedió al promediar la parte complementaria, con la aparición de Palaus y Ordoqui, cuando Peñarol ya merecía la apertura. Malvín descontó sobre el final con Rúa como portero volante, pero le faltó arriesgar un tanto más. Puntos de oro para el carbonero en una serie que arrancó apretada.

Ordoqui marcó presencia en la red y terminó siendo decisiva para el triunfo.

Asomaba como una semifinal con otro perfil. Si bien tuvo sus momentos de lucha denodada y fricción, lo táctico fue ganando metro a metro y minuto a minuto el juego. Le puso un manto al partido, en el que además, las individualidades no despegaban, no terminando de ofrecer un juego atractivo. Fue Malvín es cierto, el responsable de que el trámite se diera de esa forma. El playero no le jugó ida y vuelta, golpe por golpe al carbonero. Mantuvo equilibradas las revoluciones del partido, resignando muchas veces las contras que nacían, dejando dos hombres como balance para resetear y empezar de nuevo.

Peñarol, que desde el comienzo arrinconó con la presión, no logró traducir ese arma bien empuñada, en una ventaja. Ni tampoco pudo (pudieron), conseguir chances de inminente peligro sobre el arco del otro, más que nada en los 20' iniciales. Después de unos minutos donde se terminó de acomodar, con su idea de "dormir" el partido, de evitar transiciones constantes, con mucha salida de cuatro, Malvín, emparejó el accionar. No solo pudo controlar mejor la circulación del balón, generalmente en su propia cancha, sino que también encontró dos aproximaciones de peligro con sendos corners desde la derecha.

Por su parte el manya, no quería bajar los decibeles y alertó con dos chances muy claras, una marrada a dos metros del arco por Ordoqui y otra neutralizada por una gran respuesta de Hidalgo, también ante remate de Nico a la salida de un corner sobre los 12’. A posterior, ni Peñarol ni Malvín pudieron hacerse daño. Es más, se diluyó todo en un tramo donde se protestó de ambos lados faltas obviadas por parte de la dupla, o alguna cobrada sin serlo. El 0 a 0, selló la primera etapa.

Para el regreso la historia no cambió demasiado. Sí se observó que la tendencia a presionar e intensificar el juego propuesta por el mirasol, podría encontrar réditos si es que Malvín no apuntalaba. Pasa que en defensa el playero estaba muy firme, con un Nico Mato formidable, más el sacrificio de todo el resto. Peñarol mantenía el control táctico gracias a la enorme labor de Palleiro en el líbero. El 2 se comió a todos los que marcaba, dando la sensación de que si le ponían a Fernandao de poste, también lo anticipaba. Y tanto va el cántaro a la fuente, que cruzando los 6 minutos, Palaus (que había avisado una jugada antes), recibe por el centro una bola en diagonal que Silveira deja pasar y define con maestría ante la salida del meta. Allí se abre algo el trámite, aunque las formas no variaron en casi nada.

Malvín con lo que podía ofrecer algún arranque de Sena o Jachoian, la inteligencia de Chacón.. pero no fue suficiente para alertar a “Café”. Tampoco Peñarol halló rendimientos individuales acordes a la cita, lo que hizo que el desfile de nombres, hiciera completar una escasa cantidad de minutos a jugadores de gran valía. Pero claro, si un goleador que viene en racha como Palaus, había motivado el primer grito de la tarde, el habitual matador del carbonero, tenía que decir presente. Así fue que Nico Ordoqui, giró forzado sobre los 15 minutos, cerca de la línea de outball izquierda y sorprendiendo a Hidalgo con un zapatazo bajo, puso el 2-0 casi lapidario.

Jugado por jugado, Malvín no demoró en colocar al “Gato” Rúa como golero adelantado. Al comienzo parecía dubitativo el manejo del recurso, pero finalmente se empleó correctamente. El gol vino en ataque de 5 para 4 justamente, con gran remate bajo del propio Cristian Rúa. Antes, Mato dispuso de un penal largo, notablemente parado por Sotelo. El aurinegro estuvo desde los 13' en quinta y solo cometió una infracción más. Y hasta ahí llegó Malvín. Parecía demasiado premio un empate, con solo cinco minutos de ataque decidido y efectivo. El 2-1 está bien con lo que ocurrió en cancha. En cuanto al juego, ambos equipos están en el debe, pero fue Peñarol, quien con un trabajo de obrero (a Nico y Pala), comenzó a cimentar la clasificación a la final de la Super Liga.


PEÑAROL 2 MALVÍN 1
Super Liga. Semifinales -Ida. 26/10 - 16:00
Gimnasio: Scuola Italiana. Árbitros: Pablo Bentancor (6) y Miguel Rivas(6)
PEÑ- Iniciales: 1- Emiliano Sotelo, 2- Gabriel Palleiro, 9- Víctor Rodríguez, 18- Diego Arjona, 10- Nicolás Ordoqui. DT: Aníbal Roba. Ingresaron: 4- Alexis Otero, 8- Xavier Medina, 5- Facundo Silveira, 15- Federico Fedele, 11- Bernardo Palaus.
MAL- Iniciales: 1- Emiliano Hidalgo, 4- Nicolás Mato, 8-Sergio Chacón, 7- Jorge Sena, 9- Alfonso Rivero. DT: Nicolás Moliterno. Ingersaron: 12- Maximiliano Jachoian, 10- Mathías Maurente, 19- Bruno Perdomo, 5- Sarandí Sobral.
Goles: Bernardo Palaus (26'20") y Nicolás Ordoqui (35'35") PEÑ
Christian Rúa (38'22") MAL
Amonestados: Víctor Rodríguez y Facundo Silveira. PEÑ // Jorge Sena, Nicolás Mato y Sarandí Sobral. MAL
Incidencia: Emliano Sotelo desvió un doblepenal de Mato a los 37'04"
El MVP: Gabriel Palleiro. Un relojito, anticipando siempre, balanceando notable y jugando bien con pelota. El más regular del carbonero.

MOMENTO CUMBRE
Por la trascendencia que termina cobrando su gol, el 2-0 parcial de Ordoqui se erige en determinante. Media vuelta habitual del 10 y a cobrar.

MOMENTO KODAK 
La gran tapada de "Café" Sotelo a Nico Mato en el doblepenal. Pelota clave para que  Malvín no descontara con premura, en un gesto técnico brutal del 1, quien envió con la zurda al corner.