LA REALIDAD DE LOS PASES

LIBERTAD TOTAL 
La polémica del pase de Catardo de regreso a Peñarol en un mismo período abrió un nuevo panorama. Lo que se puede, lo que no y cómo se planteará en el futuro una situación parecida para los jugadores. Toda la explicación en el siguiente informe.

Algunas de las cuestiones "reglamentarias" referentes a los pases en el fútbol sala, que durante años se mostraban instaladas con rigidez absoluta, siguen quedando obsoletas e inútiles ante un nuevo hecho que respaldado por el amateurismo de la disciplina, ofrece muchas más libertades que las que nos quisieron hacer ver dirigentes y delegados de turno.

En un momento fue la lista de retención, con un agregado para mayores de edad, que quiso impedir la salida de Juan Custodio de Nacional. Juventud impuso un recurso de amparo laboral por fuera de la AUF y la situación se destrabó inevitablemente y tras esa novela del 2009, ya todos nos olvidamos de la famosa lista.

Ahora fue la situación que involucró a Richard Catardo, jugador que solicitó dos pases en un mismo período, previo al comienzo de la temporada oficial 2014. Varias personas hicieron sus averiguaciones sobre la validez de la movida, la cual incluso nosotros considerábamos podía realizarse solamente con un consentimiento especial del club al cual dejaba en última instancia, o sea, Old Christians.

Hubo un antecedente cercano que marcaba con claridad el proceder. En el 2013, la jugadora Giovana Turturiello solicitó pase a principios de año desde Bella Vista a Nacional. Pasaron los meses, el torneo oficial femenino demoró su inicio y la player finalmente recaló en Udelar. Lo que se hizo allí, fue un pase con carta de consentimiento especial de Nacional, además de la autorización habitual del club al que llega.

Pero en este caso, Catardo simplemente pidió pase. Primero fue de Old a Peñarol en diciembre, para jugar la Libertadores. Si era a préstamo o no, era lo mismo, porque la temporada ya había finalizado. Luego en verano 2014 volvió a pedir pase para Old Christians, hasta la reciente instancia, donde vuelve a pedir pase para Peñarol. Según el Dr. Horacio Pintos, gerente administrativo de la AUF, el movimiento no estuvo impedido en nada por el reglamento, ya que no hay contratos de por medio que "aten" a los jugadores.

Lo único que sí inhabilita a los jugadores a pedir un nuevo pase en la temporada, es el haber sido parte de un formulario del campeonato local, algo que no se dio en este caso. Lo otro que limita el reglamento, es que el jugador en una misma temporada pertenezca a tres instituciones distintas, por lo que Catardo solo podría solicitar pasar a Old Christians.

Sobre la fecha de finalización del período de pases, también es una mera formalidad. El pase de Rafael Ramos de Peñarol a Old el viernes previo al arranque del torneo lo confirmó. Cualquier jugador que no haya estado en planilla este año, es libre y puede pedir pase en cualquier momento, salvo dentro del lapso de las tres últimas fechas del campeonato, ya que ahí la AUF hace extensible una reglamentación del fútbol campo.

¿Usted se preguntará por el segundo período de pases del año? Sí, debería haber uno tal cual lo hubo a mitad de temporada (suponemos entre 1ª y 2ª rueda). Allí sí, los jugadores necesitan el consentimiento del club del que se marchan.

Si vamos a la esencia del asunto, incluso para Pintos, hay algo de injusticia con el escenario actual. Supongamos que un jugador es traído desde el exterior y un club se hace cargo del costo del pase internacional, entrena y planifica el año con él. Si el futbolista quiere luego pedir pase local para otra institución antes de debutar, lo puede hacer sin problemas.

En definitiva, libertad total. Se habla que para el año 2015 piensan encaminar desde algún aspecto este "vacío" reglamentario en el fútbol sala, para por lo menos limitar situaciones alevosas. Por ahora, al no haber contratos ni nada especificado para nuestro deporte, prácticamente, vale todo.