¿QUIÉN TOCA PITO?

Desde el 19 de Diciembre los árbitros por intermedio de su agremiación AUDAF, comunicaron que no van a dirigir más partidos de futsal. El Colegio de Árbitros anunció que tampoco realizaría las designaciones.

¿El motivo? La actividad femenina que se llevó a cabo con el arbitraje de dos particulares. En esa ocasión, los jueces llegaron en hora pero no así la policía, por lo que los hombres de negro no iniciaron el juego. Pero jugadoras, técnicos y responsables de los clubes llegaron a un común acuerdo y considerando la falta de fechas (era Martes 16 y el Domingo 21 se tenía que disputar la final) y la ya insostenible situación de suspensiones continuas, decidieron jugar el match con dos jueces improvisados. Algo que cabía perfectamente dentro de la lógica dado que el femenino es un campeonato Promocional y que no se puede estar cambiando de fijación todos los días teniendo en cuenta los trabajos y compromisos particulares de los verdaderos/as protagonistas. Claro, esta realidad choca con lo que los árbitros firmaron con las autoridades y quieren que se respete: el hecho de en que cada partido haya guardia policial para su seguridad. Inclusive (desde éste año) en categorías sub 15 y femenino.
Y ahí se da otro choque, el de los compromisos pactados y el del sentido común. Nosotros sabemos que los árbitros han conseguido con su lucha gremial muchas cosas desde los inicios del futsal, y por suerte hoy en día tienen una buena paga, viáticos, protección y no están desamparados en ningún aspecto. Pero cuando hay un partido de chicas, un Martes cercano a Navidad y con diez personas en la tribuna (finalmente 8 ya que dos entraron a pitar)... podría primar el sentido común y colaborar para que todo se desarrolle sin inconvenientes. No discrepamos con AUDAF en su llamado de atención a cumplir con los acuerdos, pero sí con su intransigencia y en poner de nuevo al futsal entero rehén de su posición. Si se anuncia que mantienen su "paro" hasta tanto "se mantenga esta situación irregular", ¿Qué se quiere decir? ¿Volver a jugar los partidos desde la semifinal? ¿Pedir la anulación de los mismos? Las finales de Sub 20 y de la B no se pudieron jugar debido a su medida gremial.
En nuestra opinión, se debería bajar la pelota de una vez por todas. Aquí hay un error de origen y
sin querer meternos en el bolsillo de nadie, los árbitros deberían darse cuenta en la estructura en que están insertos. Claro, ellos son de AUF y muchos también trabajan en el fútbol de cancha, pero tienen que saber de las enormes diferencias de apoyo con la que cuentan los clubes. Directamente no hay apoyo. El Futsal es un deporte sin ingresos, que no da dinero a los clubes ni yendo a un mundial la Selección, entonces cómo pretender encarecer costos año a año. El deporte lo hacen las instituciones, y cada vez son menos la que pueden bancar una estructura semiprofesional como la que se busca. Ecuación simple: sin instituciones nos quedamos sin deporte = los jueces sin trabajo. Reiteramos nuestra solicitud de trabajar todos juntos para que el deporte salga adelante. Sin recriminaciones, pero mirando a los costados para ver donde se está parado. Un juez con 4 partidos de liga más alguno de sub 20, situación que generalmente se da, de que arbitre el mismo en dos categorías, llega a ganar más de 3500 mesualmente. Un jugador, salvo casos excepcionales de 4, 5 figuras, no cobra nada. Entonces si tuvieramos que ser justos, el día que se agremien los jugadores y exijan lo que les corresponde, directamente nos quedaríamos sin futsal.